martes, 28 de agosto de 2012

El fútbol español durante el franquismo: La Gran Tergiversación


Cuando le expliqué a un amigo simpatizante del Barcelona y que vivió en la ciudad condal durante cuatro o cinco años que el fundador de este club fue un suizo llamado Johan Gamper (que no Joan) que jugó en el FC Basel y que de este club llevó los colores azul y rojo al Barcelona, me respondió "¿y sabes que tuvo que pedir permiso a Franco?" No sabía si reír o llorar de tanta incongruencia cronológica provocada por la histeria del barcelonismo con el dictador a quien condecoró con una medalla de oro del club y su manía de tergiversar la historia. Entonces le dije que en 1899 me parece que Franco no estaba en disposición de dar o denegar permiso a nadie para fundar un club.

- No, ya, quería decir que tuvieron que pedir permiso después porque Franco prohibió el Barcelona durante unos meses.
- No creo, ya que el Barcelona ha disputado todas las temporadas de liga en Primera División (desde 1928).
- Pues sería Primo de Rivera.
- Me extraña, la Liga comenzó durante su dictadura.

Al día siguiente me acordé del cierre de Les Corts en 1925 durante seis meses después de que numerosos aficionados en este estadio silbaran al himno de España cuando sonó antes de un partido. Se lo dije pero me dijo que no hablaba de eso y que me mandaba un vídeo de Crackòvia que era parte de una serie sobre la historia del Barça de donde se había sacado tal mentira. Una fuente muy rigurosa, desde luego. Lo vi y me indigné.

El tal vídeo hablaba de la recalificación del campo de Les Corts (durante el franquismo) y la construcción del Camp Nou. Lo más impresionante es que los genios humorísticos eran capaces de hacerte creer que la directiva del Barcelona era enemiga del régimen que les estaba recalificando el antiguo estadio, es decir, salvando al Barcelona de una situación económica muy crítica. No contentos con esto, asocian un retrato de Franco al escudo del Real Madrid, sin venir a cuento para nada, por supuesto. Pero hay que repetir estas asociaciones simbólicas para que la gente (no solo los culés) las acabe creyendo y aceptando sin comprobar su veracidad. De hecho, también en el vídeo hay un error cronológico ya que la recalificación de Les Corts se decreta en 1965 y no en 1953.

Repasemos pues la historia del fútbol español durante el franquismo. Veamos los datos, el palmarés, y no la historia paralela que ha montado durante años el entorno del FC Barcelona y que mucha gente a lo largo y ancho de España se cree. Contemos algo de la parte de la historia que obvia el revisionismo culé, ávido de alimentar una historia de victimismo, de superioridad que trasciende de lo futbolístico hasta lo moral pero siempre cercenada por los malos de la historia.


Antecedentes:

Aunque los clubes más antiguos de España fueron fundados en las dos últimas décadas del siglo XIX, no se organizó una competición oficial a nivel nacional hasta 1903: el Campeonato de España, es decir, la Copa, que ha cambiado su denominación con el régimen político (pero se ha mantenido hasta hoy como Campeonato de España). En los primeros años dominaron el Athletic Club, el Madrid (con 4 Copas seguidas durante su primera década de historia) y destacaron también el Barcelona y grandes que han caído en el olvido como la Real Unión de Irún o el Arenas de Guecho. En 1928 se jugó el primer Campeonato de Liga, con 10 equipos tomando parte en la Primera División: los seis campeones que había tenido hasta entonces el Campeonato de España (Athletic, Arenas, Real Madrid, Real Sociedad, Barcelona y Real Unión), tres que habían sido subcampeones (RCD Espanyol, Atlético de Madrid y Europa) y el décimo (Racing de Santander) salió de un torneo clasificatorio previo. En 1934 se amplió a 12 equipos. 

El primer campeón de Liga fue el FC Barcelona al que siguió el Athletic con dos títulos seguidos. Los años 30 fueron para el Madrid, que ganó sus dos primeros títulos de liga y fue subcampeón durante las otras tres temporadas que se jugaron durante la II República, a los que sumó dos títulos de Copa. En este equipo jugaron algunas de las primeras estrellas del fútbol español, como el mítico Ricardo Zamora, la pareja de centrales Ciriaco y Quincoces, Luis Regueiro procedente de la Real Unión o Lecue, el delantero del Betis que ganó la primera y única liga hasta ahora en la historia de este club.

Franquismo (1939-1975):

La guerra civil acabó con las competiciones futbolísticas, salvo por algunas que nunca fueron de ámbito estatal como la Copa Catalunya o la Copa de la España Libre de 1937 (que no fue Campeonato de España, por mucho que le pese al Levante). El Madrid fue incautado por el Frente Popular a poco tiempo de estallar la guerra civil. El diario Informaciones lo describió así:
"Un club democrático como el Madrid, con un plantel de socios netamente republicanos de izquierda, no podía temer nada. La Deportiva Obrera, que tiene un gran concepto de los principios deportivos, encontró justos los razonamientos de algunos socios, y juntos concibieron un plan que ha sido puesto en práctica y aprobado sin excepción alguna, por todos los sectores deportivos de Madrid."
Por cierto, el presidente del Madrid desde 1935 había sido Rafael Sánchez Guerra, político republicano de centro, que fue detenido y condenado a 30 años de cárcel por el régimen franquista. No los llegó a cumplir, se exilió y llegó a formar parte del Gobierno republicano en el exilio. Luis Regueiro fue capitán de la selección vasca que realizó una gira por Europa durante la guerra civil.
La guerra vino muy mal a casi todos los clubes de España. Algunos perdieron jugadores, directivos o su estadio. Como el Oviedo, que no pudo disputar la primera liga del franquismo, ocupando su lugar un remozado Atlético que compitió como Atlético-Aviación, al resultar de la fusión del Aviación Nacional de Zaragoza, dependiente del Ejército del Aire, y el Atlético de Madrid. 

La primera competición oficial del franquismo fue la Copa de 1939. La ganó el Sevilla FC, siendo el primer título oficial y abriendo una época bastante exitosa en los años 40 (incluyendo su hasta ahora única liga, en 1946, y otra Copa, en 1948). Curiosamente, el equipo subcampeón fue el Racing de Ferrol, de la ciudad natal de Franco, constituyendo este el mayor éxito de su historia. No quiero implicar que fuera por mano de Franco, a quien, por cierto, dicen que le interesaba poco el fútbol hasta que se percató de que podía utilizarlo con fines propagandísticos.

Las dos primeras ligas, fueron pues, para el Atlético (Aviación), sus dos primeros títulos. Otro club que emergió fue el Valencia (2 ligas en los 40), pero el Barcelona fue el mejor club de la posguerra con 5 campeonatos de liga y 4 de copa (hasta 1953). Era el Barcelona de Kubala, que hizo que Les Corts se les quedara pequeño y necesitaran de otro estadio.

¿Y el Madrid, dónde estaba el equipo franquista, según algunos? El Madrid atravesó la peor época de su historia. Solo consiguió dos títulos: las Copas de 1946 y 1947. Si bien es discutible si la Liga era más importante que la Copa, ya que al campeón de esta última se le seguía llamando campeón de España (lógico, ya que no dejaba de ser el ganador del Campeonato de España), es cierto que el Madrid no solo no ganó ninguna liga, sino que cosechó los peores puestos de su historia convirtiéndose en un equipo de media tabla y salvándose de jugar la promoción en la última jornada en la 1942/43 y a dos puntos del descenso (11º) en 1947/48. Sin embargo, durante este periodo comenzaron a sentarse las bases de los grandes éxitos venideros gracias a un hombre que había sido jugador y entonces era presidente y que era madridista como nadie: Santiago Bernabéu. En 1947, la peor liga de la historia, se inauguró el nuevo estadio de Chamartín (actual Estadio Santiago Bernabéu) colindante con el antiguo, donde había jugado el Madrid desde 1924.

Por cierto, el Madrid recuperó el título de Real, como el resto de clubes que lo poseen. Además, mantuvo la banda morada de su escudo (que Florentino se empeña en hacer azul), añadida en 1931, siendo así el único equipo que tiene un símbolo monárquico y uno republicano. Cómo sobrevivió esa banda al franquismo solo puede explicarse por pura ignorancia. Los clubes con nombres extranjeros tuvieron que españolizarlos. Así, el Athletic Club pasó a ser Atlético de Bilbao y el FC Barcelona, CF Barcelona, por ejemplo. El Barcelona eliminó dos barras de la señera de su escudo que reincorporaría más tarde. Lo mismo sucedió con otros como el Atlético de Madrid (antes Athletic) y el Real Madrid CF (antes FC), que no lo revirtieron después.

La época dorada del Real Madrid comienza en 1953 con el fichaje de Di Stéfano, entre otros (pues no era la única gran figura que jugó en el club en los años 50). Este fichaje provocó mucha controversia porque le ataron un tanto el Barcelona como el Madrid. La UEFA acabó tomando una decisión salomónica: dos años para cada uno. El Barcelona renunció y se quedó en el Madrid. La historia oficial culé ve aquí una intervención decisiva de Franco. Creer que un régimen que apenas estaba saliendo del aislamiento internacional (aún España no era siquiera miembro de la ONU) pudiera ser tan poderoso en las instituciones del fútbol europeo es cuanto menos ingenuo. El caso es que Di Stéfano recaló en el Madrid y alrededor de él se construyó un equipo de leyenda que consiguió hazañas que no han sido repetidas. Pero no debemos olvidar a otros grandes jugadores de este equipo como Canario, Gento que despuntó más tarde; y los que se fueron incorporando, como Kopa, la estrella del Stade de Reims que jugó la primera final de la Copa de Europa, y el grandísimo Ferenc Puskás, único jugador que ha marcado 4 goles en una Final de la Copa de Europa... y también el único en marcar un hat-trick en una final y perderla.

Un episodio que gusta a los de la historia paralela es el de la semifinal de la Copa de 1943 en la que el Madrid gana por 11 a 1 al Barcelona. Ellos lo atribuyen a que la Guardia Civil amenazó a los culés y les obligó a dejarse ganar por el eterno rival. A mí me parece bastante estúpido amañar una semifinal para que al final el equipo beneficiado pierda en la final contra el Athletic de Bilbao.
El episodio del que no gustan tanto es el de la famosa eliminatoria de los árbitros ingleses, Mr. Ellis y Mr. Leafe, en la Copa de Europa de 1961, que enfrentó al Barcelona y al Real Madrid en octavos de final. El Barcelona ganó por 2-2 y 2-1 con arbitrajes muy discutibles, sobre todo en el partido de vuelta en Barcelona. El equipo catalán, repleto también de grandes jugadores como Kocsis, Czibor, Luis Suárez o Ramallets, llegó a la final, que perdió contra el Benfica por 3 a 2.

Es curioso que en el periodo 1955-60 en el que el Madrid gana sus primeras 5 Copas de Europa y la primera edición de la Copa Intercontinental, solo consigue ganar dos ligas. El Athletic gana una y el Barcelona, dos. Evidentemente, es muy lógico pensar que el Madrid ganaba Copas de Europa gracias a Franco, pero no ganaba Ligas ya que Franco pintaba más en Europa que en España.

En los años 60, el Real Madrid dominó en España, ganando 8 de las 10 ligas entre 1960/61 y 1969/70, gracias a lo cual se quedó con 2 trofeos en propiedad. Las otras dos fueron para el Atlético. En la Copa, hubo mucha alternancia: Zaragoza, Valencia, Atlético, Barcelona, Athletic y Real Madrid se llevaron algún título en los 60. El Real Madrid llegó a 3 finales de la Copa de Europa, pero solo ganó una, en 1966 contra el Partizán. Ya sin Di Stéfano ni Puskás a partir de la mitad de la década, era el Madrid yé-yé, y fue el primer equipo en ganar una final de la Copa de Europa con 11 jugadores del mismo país. El Celtic lo llevó más allá al año siguiente, ganando la final con jugadores nacidos en un radio de 30 millas (poco menos de 50 km) de Glasgow. El Atlético fue campeón de la segunda edición de la Recopa de Europa (1962). En la Copa de Ferias dominaron los equipos españoles . En 1966 el Barcelona sumó un título a los de 1955/58 (en este no participaban clubes sino combinados de clubes de ciudades por lo que estrictamente no es del FC Barcelona, aunque 10 de los 11 que jugaron la final y la mayoría de partidos pertenecían a este club y por tanto se le atribuye oficialmente) y 1958/60, mientras que el Zaragoza ganó su primer título europeo después de que el Valencia la ganara en dos temporadas consecutivas.

El Barcelona estuvo sin ganar una Liga desde 1960 hasta 1974 (cuando inauguraron el Palau Blaugrana y condecoraron al ya decrépito dictador, que ya no era el jefe del gobierno). Después, tuvo que esperar de nuevo hasta 1985 para ganar otra. El Athletic tuvo que esperar aún más, desde 1956 hasta 1983, aunque ganó 3 Copas en ese periodo y en blanco desde 1984. Los 70 vieron la Liga del Valencia de Di Stéfano y al Atlético ganar su penúltima Liga hasta la fecha, además su ganar la Copa Intercontinental sin ganar la Copa de Europa (1974).


Palmarés de las competiciones nacionales entre 1939 y 1975:

Real Madrid: 14 Ligas (de 32), 6 Copas (de 18).
FC Barcelona: 8 Ligas (de 21), 9 Copas (de 26)
Atlético de Madrid: 7 Ligas (de 9), 4 Copas (de 9)
Athletic Club: 2 Ligas (de 8), 9 Copas (de 23)
Valencia: 4 Ligas (de 6), 4 Copas (de 7)
Zaragoza: 2 Copas (de 6)
Sevilla: 1 Liga (de 1), 2 Copas (de 5)
Espanyol: 1 Copa (de 4).                    

Palmarés de competiciones internacionales 1939-1975:

Real Madrid: 6 Copas de Europa (de 9), 1 Copa Intercontinental (de 3), 2 Copas Latinas
FC Barcelona: 3 Copas de Ferias, 2 Copas Latinas
Valencia: 2 Copas de Ferias
Zaragoza: 1 Copa de Ferias
Atlético de Madrid: 1 Recopa de Europa (de 1), 1 Copa Intercontinental (de 1)

domingo, 8 de julio de 2012

Mi resumen de la temporada


Una vez acabada la temporada ya hay ganas de que empiece otra vez. Haré mi particular resumen, sin pretensiones de imparcialidad, centrándome en la liga española pero comentando un poco el resto.

Liga española: más escocesa que la escocesa

La tendencia escocizadora continúa, y personalmente me preocupa, a pesar de haber disfrutado con el juego del Madrid y la consecución del título con todo merecimiento.

100 puntos significa que te dejas 14 en toda la temporada. ¡Catorce! 32 victorias, 4 empates y 2 derrotas. El Barcelona con 91, puntos de campeón en una situación normal, como el Madrid subcampeón de las últimas temporadas. El tercero a treinta puntos del segundo.

121 goles, a más de 3 por partido. Esto merece un aparte. Espero que a nadie se le ocurra decir ya que el Madrid de Mourinho es un equipo defensivo o que Mourinho es un entrenador ultradefensivo. El Real Madrid este año ha sido una auténtica máquina de generar fútbol ofensivo. Ocasiones, una tras otra. Los 121 goles no vinieron de la famosa "pegada" que no veo desde la 2006/07, porque con ella podrían haber sido 160. En el 0-0 contra el Valencia el Madrid tiró más de 30 veces. Pero este Madrid ha crecido mucho este año, aunque haya defendido peor a veces, pero ahora ya es un equipo campeón de verdad. Lo demostró en el Camp Nou, ganando donde no ganaba ni la Quinta, cuando más dudas había en torno al equipo y muchos, incluso madridistas (que deberían sentir vergüenza), daban esos tres puntos por perdidos.

El récord de Cristiano de 2011 pulverizado por él mismo, y por el pichichi, Messi. A ninguno de los dos les valió de mucho ganar el pichichi, pero esa es otra historia. Por cierto, este año batiendo el récord de promedio de goles de Zarra, cosa que ni Hugo Sánchez ni Cristiano Ronaldo hicieron. Se hablaba mucho de los 38 goles de Zarra y de Hugo, pero digo yo que no será lo mismo marcarlos en 30 partidos que en 38. 

Me preocupa porque la liga se hace más aburrida y no entiendo por qué no preocupa a los clubes, Madrid y Barcelona incluidos, porque no sé hasta cuándo les podrán vender la moto a los árabes o chinos para que se flipen con la liga española cuando tienen la inglesa, o la alemana, que probablemente casi no hayan descubierto.

Por otra parte, parece que esta tendencia va a continuar en otras grandes ligas. Al final, a un chino se la suda el Portsmouth de turno, solo "su" Manchester United, aunque no tiene ningún vínculo con Manchester... ni le importa. Una lástima, porque se pierde muchísimo por encontrar "aficionados" a 5000 km de distancia... hasta que se mueren por no dormir por ver la Eurocopa.

El argumento de que el Madrid y el Barcelona son tan exageradamente buenos que harían de 90 a 100 puntos en cualquier liga y que los equipos españoles lo hacen bien en la UEFA está muy bien... pero el Real Madrid no demostró ser mejor que el Bayern (que no ganó su liga) y el Barcelona se cagó contra el Chelsea (y por otra parte no demostró ser mejor que el Madrid), pero eso lo dejamos para luego. Clubes que cotizan en bolsa... al menos el Madrid y el Barcelona siguen siendo clubes de fútbol, no SAD.

A falta de emoción por arriba, la hubo por abajo. Vaya si la hubo. En dos minutos pasó de estar descendido el Rayo, a estarlo el Granada (mágico Tamudo, fuera de juego mediante) a estarlo el Villarreal. Y una vez más, Zaragoza no se rinde. Pero deberían dejar de seguir jugando con fuego. Es una lástima ver a un club como el Zaragoza en esta situación debido a una mala gestión.

No se puede hablar de la liga española esta temporada sin hablar del Levante. Increíble lo que ha hecho este equipo, entrando en Europa, sin un duro, con una plantilla hecha a base de jugadores cedidos o que otros no querían. No fue suerte. No puede serlo después de 38 partidos y sobreponiéndose como pudieron a la lesión de Juanlu. No vi todos sus partidos, evidentemente, pero me gustaba verles cuando podía. Me preguntaba ¿cómo pueden hacerlo? Con un equipo muy bien trabajado (a pesar de la marcha de su Luis García Plaza), serio, solidario y una muy buena salida al contraataque. Y estas preciosas historias se perderán si llegamos a la liga paneuropea para dar gusto a los chinos y árabes... y quizás a la arcas de algunos.

Ligas internacionales

La Juve vuelve, después del Moggigate. Otra vez el trío que se reparte las ligas... salvo cuando las designaciones arbitrales se hicieron aleatoriamente y la ganó el Hellas Verona (no confundir con el "engendro" del Chievo), allá por 1985. Ya sé, que otros fuera del trío han ganado ligas después de entonces, pero no quería dejar de comentar este curioso dato.

Me abstendré de hablar del Arsenal, porque puedo ser muy injusto. El 8-2 no se puede tolerar y el estar tantos años sin pelear por nada casi por decisión propia de Wenger en una especie de suicidio tampoco. Oxlade-Chamberlain... a ver, Walcott también iba a ser un dios y no ha llegado a tanto.
Por fin los aficionados del Manchester City pueden celebrar la liga, que sabrá como ninguna por la larga espera y por ganársela a su archirrival en el descuento del último partido. Me alegro por ellos y el club, pero no puedo aprobar su gestión, el cómo lo han conseguido. Una plantilla de PC Fútbol. Agüero, Ballotelli, Tévez, Džeko. 4 delanteros centros de gran nivel. Al final, de tanto juntar estrellas han acabado siendo otra gran máquina de fútbol ofensivo, rápido, vistoso (no para los amantes de las series de pases horizontales en campo propio).

Impresionante el Borussia Dortmund dominando la Bundesliga después de fracasar en Europa, a pesar de la marcha de Nuri Sahin. En mi opinión, hoy en día la liga alemana es la más bonita para el espectador (y con muy buenos precios para ir a los estadios). La liga más abierta, con calidad suficiente, tendencia ofensiva, sorpresas. El mítico Borussia Mönchengladbach sorprende a todos codeándose con los de arriba después de jugar la promoción la temporada pasada. Y el Hertha, de nuevo a la segunda división. Probablemente Alemania sea el único país de Europa cuya capital (y ciudad más poblada) no tiene un equipo en la primera división de la liga de fútbol (y no gana una liga desde los años 30). Berlín y París, dos grandes capitales sin grandes equipos. Al menos el Hertha es un histórico y auténticamente berlinés...

No como los parisinos, que tuvieron que traerse un equipo de los suburbios en los años 70. Y ahora otra vez con la ayuda de otro multimillonario... pero siguen sin ganar la liga. Grande, grandísimo Montpellier. ¿Será el último pequeño en ganar una gran liga, Alemania aparte, en muchos años? Los sureños ganaron su primera liga con mucho sufrimiento y total merecimiento. En el último partido en Auxerre se les veía muy nerviosos. Y desde luego no era para menos, al empezar perdiendo contra un equipo ya descendido. Más de 30 años después el sueño creado por Guy Roux (44 temporadas seguidas entrenando al club) se desvanece... pero no para siempre. No puedo dejar de censurar a la afición del Auxerre en este último partido. Solo fue bueno su comportamiento con su capitán, Grichting, que deja el club para volver a su país natal en las filas del Grasshopper. Estos cafres provocaron que el partido se detuviera en dos ocasiones, incrementando los nervios de los jugadores occitanos y descojonando la unificación de horarios. En la última jornada, con la liga en juego. Al final, desalojo de esta zona de la grada mediante, el Montpellier pudo celebrar su primer título de liga.

La verdadera liga escocesa se queda sin uno de los de la Old Firm. No se sabe aún qué pasará con el Rangers, pero la temporada que viene promete ser aburrida... a no ser que el Celtic no arrase y se abra. Improbable pero no imposible. Siempre quedará la Copa para las sorpresas. Gran derbi de Edimburgo en la final, que se volvió a llevar el Hearts.

En cualquier caso, no será más aburrida desde luego que la liga suiza 2011/12. Probablemente la liga europea más aburrida de la historia. Con el Neuchâtel descendido a mitad de la temporada la plaza de descenso directo estaba ocupada. La de promoción recaería en el Sion al haberle sustraído 34 puntos (a pesar de haber hecho números de subcampeón)... y por arriba la liga era del Basel, con los dos clubes de Zúrich haciendo el ridículo. Solo las plazas europeas estaban en juego: al final Luzern, Young Boys (probablemente el equipo con el nombre más cachondo de Europa, más bien parece un garito gay) y Servette. El fin de semana que viene empieza la 2012/13, con el gran Gennaro Gattuso como flamante fichaje del Sion. Le presentaron en una bodega de vino de la región. El Sion nunca dejará de sorprenderte.

Para la próxima dejo las competiciones europeas.

martes, 6 de marzo de 2012

Final de la Copa de 1936: La última exhibición de Zamora


Hoy, 110 años después de la fundación del equipo más laureado del mundo, el Real Madrid, es un buen día para recordar un partido que en su momento fue muy importante pero que hoy en día las glorias futuras de competiciones que entonces ni se habían concebido han eclipsado hasta llevarlo casi al olvido: la última final de Copa republicana, o la última exhibición de Ricardo Zamora. 21 de junio de 1936, Real Madrid-Barcelona, en Mestalla, ¿os suena?

Jugaron esta final por el Real Madrid, además de Zamora, la primera mítica pareja de centrales de este club, Ciriaco y Quincoces; los irundarras hermanos Regueiro (Luis fue capitán de la selección vasca que realizó una gira durante la Guerra Civil); y Bonet, Sauto, Eugenio, Sañudo, Lecue (uno de los mejores delanteros de la época, procedente del Betis, con el que ganó el único título de liga del equipo sevillano) y Emilín. Por el Barcelona, formaron Iborra, Areso, Bayo, Argemí, Franco, Balmanya, Vantolrà, Raich, Escolà, Fernández y Munlloch.

Como todo buen partido histórico, esta final tiene una foto característica. La parada de Zamora a tiro de Escolà con 2-1 en el marcador y con el tiempo casi cumplido. Gracias a ella, el partido acabó con ese resultado y el Real Madrid ganó su séptima copa (desde entonces solo ha ganado 11). 

Así concluyó la que puede considerarse como primera gran época del Real Madrid, olvidando las cuatro Copas seguidas en su primera década de vida, o bien la última antes de la Copa de Europa. Época que dio paso a la Guerra Civil, menos de un mes después de esta final, y a la indudablemente peor época de la historia del club blanco, hasta 1953. En efecto, en el periodo 1931-1936 el Real Madrid (o más estrictamente el Madrid FC, pues esta era su denominación) conquistó sus 2 primeras Ligas y 2 Copas, con 3 subcampeonatos de Liga de 1 de Copa, siendo probablemente el mejor equipo de España.

Una gran despedida para aquel equipo, y, sobre todo, para su mítico portero catalán.

lunes, 20 de febrero de 2012

¡Campeones y Reyes de Copas (de baloncesto)!


Se supone que este es un blog de fútbol. Sin embargo, hoy también es un lugar donde expresar mi gran alegría al ganar la Copa del Rey por fin, 19 años después, cuando menos se podía esperar, como menos se podía esperar. Es una lástima que no se vaya a poder lograr la aún más ansiada Euroliga, pero creo que pronto llegará... No, también voy a hablar un poco de fútbol hoy.

Si un aficionado desde pequeñito, abonado a su equipo desde hace ocho temporadas, puede dedicarle a alguien el triunfo de su equipo yo esta Copa se la dedico a todos aquellos que se dicen madridistas y ningunean y menosprecian a su sección de baloncesto, que casi anhelarían su desaparación... la desaparación no ya de una sección que ha dado prácticamente tanta gloria a su club como la de fútbol, sino la del mejor equipo de baloncesto FIBA de la historia ¡qué barbaridad! ¡Qué sacrilegio, portando el escudo que dicen amar!

8 Copas de Europa, 23 Copas, 30 Ligas, siendo el equipo que más veces ha ganado estos trofeos, a los que se suman otros 6 títulos europeos - 4 Recopas, 1 Korac y 1 ULEB - más de 80 años de historia... cuna de históricos como Corbalán, Ferrándiz y Raimundo Saporta, uno sobre la cancha, otro en el banquillo y otro en los despachos. Equipo respetado en toda la cuenca del Mediterráneo y en Lituania y Rusia (la Europa baloncestística, pero también de fútbol), que da casi tanto empaque al Real Madrid como el de fútbol. ¡Cómo puede un madridista despreciarte! Si en la antigua Yugoslavia el Real Madrid es claramente el equipo extranjero más querido y respetado es en parte por la pelota naranja, porque en Bosnia a cualquiera le viene rápido a la mente el nombre del gran Mirza Delibašić, que estuvo poco por aquí, como en Lituania el de Sabonis... y en todas partes los de Emiliano, Brabender, Luyk, Fernando Martín y muchísimos más.

Cuando en fútbol se tuerce y el baloncesto salva la temporada, como con aquel mágico triple de Herreros, algunos de estos madridistas se acuerdan, momentáneamente, de que el escudo que llevan esos grandullones en su pecho les suena de algo. O como cuando en los años 70 el Madrid rivalizaba con el mítico Varese y le ganaba 2 finales de Copa de Europa de las 4 que les enfrentaron (en la peor década del equipo de fútbol desde los años 40).

Ni mucho menos intento menospreciar al equipo de fútbol, tan mío como suyo, sino recordarles que el Real Madrid tiene un equipo de baloncesto que es muy grande y que lejos de dejarle languidecer hay que hacerle revivir, que vuelva a ser dominador, que la próxima alegría grande sea ser campeón de Europa por novena vez. Y que es también Real Madrid.

jueves, 9 de febrero de 2012

Falsos mitos: La inmutabilidad de las reglas de juego del fútbol


Hace alrededor de un año oí a Jorge Valdano utilizar como argumento contra la inclusión de un árbitro de vídeo u otro sistema similar para ayudar al árbitro principal en decisiones complicadas que las reglas del fútbol llevaban cien años siendo iguales y puesto que la cosa iba bien no había necesidad de cambiarlas. Dejaré de lado la fragilidad del argumento para comentar este falso mito en el que cae mucha gente además del ex-futbolista, entrenador y psicólogo argentino.

Desde luego, el señor Valdano no solo desconoce la historia del reglamento de su deporte sino que tiene muy mala memoria. Cuando él era futbolista, ver al portero atrapar el balón con las manos después de un pase con el pie o de saque de banda de un compañero era una escena tan típica como inverosímil hoy. También lo era que un portero, después de atrapar el balón, lo jugara con el pie para volverlo a coger con las manos. Demasiado típicas debieron de ser durante el Mundial de Italia'90 pues esta regla se introdució en 1992 después del espectáculo de fútbol ultradefensivo y pérdidas de tiempo que permitía el reglamento. La palma se la llevaron los irlandeses, cuyo portero, Packie Bonner, se tiró 6 minutos echando el balón al suelo para volverlo a coger. Es lógico, y sucede en cualquier deporte, modificar o introducir una regla cuando se identifica la necesidad de ello. Esta regla tuvo una gran influencia, más allá de reducir las pérdidas de tiempo, al facilitar la presión en todo el campo y obligar a los porteros a ser más hábiles con los pies.

Pero no ha sido esta la única regla que se ha cambiado en los últimos 100 años. En 1990 se comenzó a sancionar con tarjeta roja una violación del reglamento que evitara una ocasión manifiesta de gol. Era lo que los ingleses llamaban professional foul, como la que cometió Willie Young, del Arsenal, sobre Paul Allen, del West Ham, en la final de la FA Cup de 1980, justo fuera del área y que con el reglamento vigente entonces solo le costó una tarjeta amarilla.

Un poco después, en 1995 se amplió de 2 a 3 el número de sustituciones permitidas para cada equipo. De hecho, hasta los años 50 o 60, según la competición, no se permitían las sustituciones, ni siquiera si un jugador se lesionaba. Cuando esto sucedía, si la lesión no era muy grave, el jugador se solía colocar en el área rival para intentar cazar algún balón y marcar "el gol del cojo". En 1932 se previeron, pero su número debía ser acordado por los dos entrenadores antes del partido, y eran muy raras salvo en partidos amistosos, aunque ya se permitieron en la fase de clasificación para el Mundial de Suiza'54. Aun cuando se autorizó una sustitución por equipo de un jugador lesionado durante la primera parte en 1958, en muchas competiciones de primer nivel no se aplicó esta regla. De hecho, la liga inglesa no lo permitió hasta 1965, y en 1967 lo extendió a sustituciones tácticas (no solo por lesión).

 En 1995 también hubo otros cambios más administrativos. Uno de ellos sí afectó directamente al juego (o al menos se pensó para que lo hiciera): otorgar 3 puntos por victoria en lugar de 2 en las competiciones de liga. Otros no afectaban al juego como los dorsales fijos para cada jugador, y no los titulares del 1 al 11 como había sido hasta entonces y la obligación de llevar el nombre en la camiseta en las competiciones profesionales. Muchos recordaréis esto, otros quizás lo hubiérais olvidado, ya que la memoria humana es muy frágil. Otro cambio "administrativo" aunque anterior fue la introducción de las tarjetas amarilla y roja en 1970. Hasta entonces las amonestaciones eran verbales y muchas veces el público no sabía si un jugador había sido amonestado o no.

Desde luego, es obligado hablar, remontándonos un poco más en el tiempo, de la regla del fuera de juego, esencial para este deporte, como para su pariente el rugby, sin la cual no se concebiría. En rugby la regla es diferente, pero el espíritu es muy similar. Pues bien, una regla tan importante y que formaba parte del primer reglamento del fútbol asociación creado en la Freemasons' Tavern de Londres en 1863, ha cambiado varias veces a lo largo del siglo XX. En este, la regla era similar a la del rugby, todo jugador atacante por delante del balón se encontraba en posición de fuera de juego. Pero pronto se cambió y al final de la década un jugador estaba en posición de fuera de juego si entre él y la portería había tres defensores (y estaba por delante del balón, claro). Así, se popularizó la pirámide (lo que hoy llamaríamos un 2-3-5) en la que el segundo defensa habitualmente marcaba la línea de fuera de juego. En 1920 se eliminó el fuera de juego cuando el balón procedía directamente de un saque de banda. Pero fue en 1925 cuando se cambió la regla quedando casi igual que la actual, al rebajar el número de defensores entre el atacante y la portería a 2. Esto cambió las tácticas que se habían usado durante años e hizo necesario tirar el fuera de juego de forma colectiva como hoy en día. De eso hace menos de 100 años... pero he dicho "casi" porque hasta 1990 también se consideraba que un jugador en línea con el penúltimo defensor estaba en posición de fuera de juego. Ya en el nuevo siglo ha habido cambios en las interpretaciones en referencia a cuándo debe sancionarse a un jugador en posición de fuera de juego.

Sería bonito remontarse más lejos, al origen de reglas que nos parecen intrínsecas al fútbol hoy en día como los penaltis, o la norma que prohíbe al guardameta tocar el balón con las manos fuera del área, que justamente cumple este año su centenario. Sin embargo, lo dejamos para otro día, una vez desterrado este gran falso mito al ver que no hace tanto tiempo reglas que hoy también damos por hechas no existían. Por tanto, si se identifica la necesidad de un cambio, si se cree que se va a conseguir mejorar el devenir de los partidos, ¿por qué no al menos plantearlo y debatirlo?